Parece que a Antena 3 le está saliendo bien la jugada de versionar series británicas. Teníamos hasta el domingo pasado a Doctor Mateo, basada en Doctor Martín. Y me atrevería a meter en el mismo saco a Física o Química que, pese a no ser estrictamente igual y ni hayan comprado los derechos, se nota que tiene claras inspiraciones en Skins.
Pues bien, ahora le ha tocado el turno a La Chica de Ayer que consiguió alcanzar un 19,7% del share (3.784.000 espectadores) permitiendo así continuar la estela que Doctor Mateo había empezado en su día.
En esta ficción nacional, Samuel Santos (Ernesto Alterio) trabaja como inspector de policía en una comisaría de Madrid, donde tiene que lidiar con numerosos delincuentes. Un buen día, tras un aparatoso accidente de coche, viaja atrás en el tiempo desde 2009 a 1977. Como coprotagonistas tenemos al inspector jefe Joaquín “Quín” Gallardo (Antonio Garrido) el tipo duro y a Ana Valverde (Manuela Velasco) que se encarga de las tareas administrativas de la oficina. En este nuevo mundo, Samuel tendrá que vivir el día a día y tratar de averiguar que le ha pasado realmente.
La serie cumple las expectativas, eso sí, para quien no haya visto la original, Life on Mars. En caso contrario puede no aportar nada nuevo y tornarse un tanto aburrida. Aunque por otra parte considero que es interesante ver la versión patria, ya que refleja un ambiente con el cual el telespectador se puede sentir más identificado.
Los productores de la serie tenían preparados dos finales, uno para usarlo en caso de que las expectativas no se cumpliesen. Afortunadamente, con estos números de audiencia parece que podemos respirar tranquilos asegurando que el final será el mismo que el original. Que como todo el mundo sabe…(mejor dejemos los spoilers para Flippy).
Veremos que tal evoluciona y esperemos que sean fieles al original sin explotar mucho la gallina de los huevos de oro. No queremos más Serranazos.
Pues bien, ahora le ha tocado el turno a La Chica de Ayer que consiguió alcanzar un 19,7% del share (3.784.000 espectadores) permitiendo así continuar la estela que Doctor Mateo había empezado en su día.
En esta ficción nacional, Samuel Santos (Ernesto Alterio) trabaja como inspector de policía en una comisaría de Madrid, donde tiene que lidiar con numerosos delincuentes. Un buen día, tras un aparatoso accidente de coche, viaja atrás en el tiempo desde 2009 a 1977. Como coprotagonistas tenemos al inspector jefe Joaquín “Quín” Gallardo (Antonio Garrido) el tipo duro y a Ana Valverde (Manuela Velasco) que se encarga de las tareas administrativas de la oficina. En este nuevo mundo, Samuel tendrá que vivir el día a día y tratar de averiguar que le ha pasado realmente.
La serie cumple las expectativas, eso sí, para quien no haya visto la original, Life on Mars. En caso contrario puede no aportar nada nuevo y tornarse un tanto aburrida. Aunque por otra parte considero que es interesante ver la versión patria, ya que refleja un ambiente con el cual el telespectador se puede sentir más identificado.
Los productores de la serie tenían preparados dos finales, uno para usarlo en caso de que las expectativas no se cumpliesen. Afortunadamente, con estos números de audiencia parece que podemos respirar tranquilos asegurando que el final será el mismo que el original. Que como todo el mundo sabe…(mejor dejemos los spoilers para Flippy).
Veremos que tal evoluciona y esperemos que sean fieles al original sin explotar mucho la gallina de los huevos de oro. No queremos más Serranazos.
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